Seguramente, más de una ocasión has visto a tus amigos —o seguramente tú lo has hecho—, que se llevan las manos a la cabeza y gritan «¡Ay, pobre gatito! ¿Se habrá matado cayendo desde esa altura?».
Pero el gato, apenas toca el suelo, emprende una veloz carrera, como si nada le hubiese sucedido. ¿Y sabes por qué?¡Porque en la planta de las patas tienen una especie de almohadilla que les ayuda a caer de pie!
¿Cómo le hacen los gatos?
Se ha observado que cuando un gato tiene una lesión cerebral y es arrojado al aire no cae parado. Pero también se ha visto que el hombre, cuando tropieza, no siempre cae, sino que muchas veces logra mantenerse en pie. ¿Te has dado cuenta?
Esto se debe a los movimientos que se realizan gracias al llamado reflejo de enderezamiento. Así que en el instante en el que el gato se siente sin apoyos, realiza una rapidísima serie de movimientos musculares que le permiten caer de patas.
Además, hay hombres que logran caer de pie después de haber dado en el aire una serie de volteretas. Ejemplo de ello son los artistas de circo y los nadadores especialistas en saltos de trampolín.
***
Algunos gatitos famosos:
Félix, el gato
Ahora sabemos por qué Garfield cae de patas luego de volar:
¿Recuerdas a Tom, el que nunca podía atrapar al ratón Jerry?
Y aquí está Silvestre, el que siempre se quería comer a Piolín. ¿Ya viste las almohadillas de sus patas?
Ahora, Bola de Nieve, el gato de Lisa Simpson.
¡Y hasta música hay de los gatos! ¿Has oído la canción del «Gato loco»?
Tomado de: «¿Por qué los gatos caen casi siempre de pie?», El nuevo tesoro de la juventud, México: Cumbre, 1984, p. 24