Cada año la revista Forbes publica una lista de los millonarios de ficción, tomando en cuenta novelas, programas de televisión, películas, juegos de mesa y videojuegos. El monto de sus fortunas se calcula con base en las historias y el valor actual de las acciones de sus empresas. Presentamos la lista con los personajes más influyentes de la cultura popular.
Jay Gatsby. Es el protagonista de la novela El gran Gatsby, que lanzó a la fama al escritor Francis Scott Fitzgerald, que es un excelente ejemplo de la prosperidad financiera que trajeron los años 20. A pesar de ser «el más pobre» de la lista, con una fortuna de apenas 1 000 millones de dólares, es quizá el que más ostento hace de ella con interminables fiestas con el único propósito de llamar la tención de su amada Daisy. Este personaje ha sido llevado a la pantalla grande en diversas ocasiones, la más reciente en 2013, interpretado por Leonardo DiCaprio, bajo la dirección de Baz Luhrman.
Mr. Monopoly. El genio de las bienes raíces, al menos en el juego de mesa, entra a esta lista con una fortuna calculada en 1 200 millones de dólares. Gracias a este juego aprendimos algunas reglas básicas de administración de bienes. En México su versión más popular es el Turista, donde este personaje no aparece.
Lara Croft. Este personaje surge de la saga de videojuegos de aventuras Tomb Raider. Lara es arqueóloga de profesión y huérfana heredera de 1 300 millones de dólares. Dentro de la trama del videojuego invierte su fortuna adentrándose en peligrosas y misteriosas ruinas abandonadas, donde suele encontrarse con saqueadores de tumbas, asesinos y por qué no, dinosaurios.
Richie Rich —Ricky Ricón—. Es también conocido como «el pobre niño rico», ya que a pesar de la inmensa fortuna de sus padres, el único amigo que tiene es su mayordomo Herbert. En su cuenta bancaria hay 5 800 millones de dólares fruto de las ganancias de las empresas de sus padres. Este personaje nació en 1953 cómo una tira cómica y en 1994 fue llevado al cine, interpretado por Macaulay Culkin.
Bruce Wayne. La vida de este magnate de Ciudad Gótica quedó marcada desde su niñez, cuando sus padres fueron asesinados frente a él. Este evento lo afectó a tal grado que juró dedicarse a combatir el crimen convirtiéndose en Batman. Para ello usa su herencia y las ganancias de las empresas de las que ahora es dueño. Su fortuna se calcula en 9 200 millones de dólares.
Charles Foster Kane. Es el personaje principal de la película Citizen Kane (1941) de Orson Welles, su riqueza asciende a 11 200 millones de dólares, misma que se ve reflejada en su impresionante mansión de nombre Xanadú, donde pasa sus últimos días. Sus primeros años los vive en la pobreza, sin embargo, su suerte cambia cuando se descubre una mina de oro en una propiedad de su madre sin aparente valor. Está inspirado en el magnate de la industria editorial William Randolph Hearst.
Smaug. Este enorme dragón rojo del universo de J.R.R. Tolkien resguarda un tesoro con un valor de 54 100 millones de dólares, mismo que obtuvo después de expulsar a los enanos de la Montaña Solitaria. Es el último de los grandes dragones de la Tierra Media, tiene alas de murciélago y una piel de escamas impenetrables, gracias a una capa de piedras preciosas y oro que se incrustaron en su piel durante siglos de resguardar el tesoro.