Uno de los triángulos de amor más famosos en la historia del rock es el que se dio entre Pattie Boyd, su esposo George Harrison y Eric Clapton. Este último se enamoró de la mujer de su amigo cuando, dos años después de que ellos se habían casado, la conoció en una fiesta.
A pesar de los intentos de olvidarla, desde el inicio se obsesionó con ella y debido a la cercanía que existía entre Harrison y él, la veía constantemente. Incluso se dice que salió con la hermana de Pattie creyendo que así ya no pensaría más en ella, pero no funcionó.
Layla, you’ve got me on my knees / Layla, I’m begging, darling please / Layla, darling won’t you ease my worried mind.
Sin embargo, el matrimonio de Harrison y Boyd no iba tan bien como se creía. Él, involucrado profundamente en el hinduismo, con las drogas y con otras mujeres también, mantenía una distancia con su esposa, y Boyd quizá muy joven para saber manejar la situación —como ella misma lo dijo años después—, fue el escenario que enmarcó el principio de una aventura amorosa entre Clapton y la esposa de su amigo.
No obstante, ella al inicio no deseaba involucrarse con él. Amaba a Harrison y buscaba solucionar los problemas de su matrimonio y se lo dijo a Clapton, pero éste insistió durante largo tiempo hasta que finalmente consiguió salir con ella a escondidas, aunque eso no era suficiente. Lo que él quería era que vivieran juntos, que dejara a Harrison, a pesar de que esto le causaba conflicto porque apreciaba muchísimo la amistad que tenía con él. Aunque, al final de cuentas, esto no lo detuvo.
«I tried to give you consolation / when your old man had let you down. / Like a fool, I fell in love with you […] Let’s make the best of the situation / before I finally go insane».
Obsesionado con ella, en los años 70 le compuso la conocida canción «Layla» —con su grupo Derek and the Dominos—, en la cual dejaba bastante claro sus sentimientos hacia ella y lo que le provocaba que no pudieran estar juntos.
Se dice que esta canción está inspirada en la historia de amor árabe de Layla y Majnun, en la cual se cuenta cómo estos dos enamorados no pudieron estar juntos debido al padre de ella y cómo él se volvió loco.
Sin embargo, a pesar de que Pattie Boyd se enteró del significado de esta canción, no cedió. No fue hasta después de unos años, en 1974, cuando Boyd le dijo a Harrison que lo dejaba, aunque el divorcio se dio hasta 1977. Una vez liberado el campo, Clapton y ella se juntaron sin necesidad de esconderse más y se casaron poco tiempo después. A pesar de lo que podría pensarse, Harrison estuvo entre los invitados a la boda. En realidad, él y Clapton nunca dejaron de ser amigos y de hecho se llamaban a sí mismos «husbands-in-law».
El matrimonio entre Clapton y Boyd, no obstante después de varios años de que él insistiera en estar con ella, no funcionó. Igual que con Harrison, ella se enfrentó a varias infidelidades y drogas, lo cual finalmente los llevó a divorciarse en 1988.
En algunas entrevistas que les hicieron a Clapton y a Boyd de manera separada, muchos años después de todo esto, ambos coincidieron en que hubiera sido mejor no estar juntos. Él menciona que se arrepiente de haber separado ese matrimonio y ella que hubiera preferido no divorciarse de Harrison.
Quizá la verdadera historia detrás de esta canción no sea tan romántica como se podría creer.
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