Lo más importante, ¿cuáles son las características de su habla? Quienes integran las generaciones Y y Z —comprendidas por los nacidos entre los años 1984-2000 y 2001-2020?, respectivamente—, son los principales consumidores de tecnología en la actualidad; no es fortuito que el desarrollo de las redes sociales los haya vuelto multiculturales y que su lenguaje y sus ideas se expandan.
En este contexto es frecuente ver cómo han empezado a
usar —y a apropiarse de— expresiones que provienen de otras regiones del mundo.
Si bien los anglicismos y otros extranjerismos ya son comúnmente aceptados por un gran sector de la sociedad, desde hace algún tiempo se han comenzado a emplear expresiones propias del español peninsular —de España—, y pareciera que «llegaron para quedarse». Una de las causas de esta influencia pueden ser
las películas y series que llegan a América y tienen doblaje del español peninsular. Pero sobre todo por los llamados Influencers: muchachos que se vuelven celebridades de YouTube y hablan sobre múltiples temas, desde videojuegos hasta maquillaje.
–¿Qué es la ultracorrección?—
A continuación presentamos un listado de algunas de esas palabras y expresiones que estas generaciones incluyen con mayor frecuencia en su lenguaje habitual, para que, en caso de que usted las escuche, pueda comprender su contexto y significado sin necesidad de emplear un diccionario.
a tomar por culo. Expresión que adquiere diferentes significados dependiendo del verbo que le preceda. Estar a tomar por culo significa «estar muy lejos». «La casa de Diana está a tomar por culo de la mía». Mandar a tomar por culo a alguien es síntoma de estar cansado de esa persona o de no querer saber nada más de ella. También para poner fin a una discusión. «Vete a tomar por culo.»
cagarse en algo. Expresión que implica enfado. Dependiendo de la palabra que
la siga indica un grado mayor o menor de enfado. «Me cago en la leche». «Me cago en tu madre.»
guay. Equivalente español a «padre» o «chido». «Esta película está muy guay». «Lo he pasado guay.»
(h)ostia. Puede ser utilizado como interjección de asombro. «¡Ostia, qué susto!». También puede ser sinónimo de «putazo». «Le dio una ostia en la cara». Puede denostar enfado en el caso de la expresión «Estar de mala ostia» o en frases como «¿Qué ostias haces aquí?». Así mismo se usa para decir que algo es muy bueno: «¡Esta peli es la hostia!».
joder. Interjección utilizada comúnmente para expresar asombro o enfado. «¡Joder, ¡qué frío hace!», «¡Basta ya, joder!».
leche. Fuera de su contexto alimenticio, interjección utilizada en los mismos casos que ostia, tanto para denotar asombro o enfado o como sinónimo de putazo, pero sin ser tan vulgar como la anterior. «¡Leche, qué susto!» «Estar de mala leche» «¿Qué leches haces aquí?» «Le dio una leche en la cara».
mogollón. Sinónimo de «mucho». «En el concierto había mogollón de gente».
vale. Sinónimo de sale. Utilizado como expresión afirmativa. «—¿Vamos al cine? —¡Vale!».
También es frecuente el uso del diminutivo «a la castellana», en vez de la terminación mexicana en -ito, -ita, se usa -illo, -illa, -i: loquillo, estupidillo, boli, peli, etcétera.
Como puede observarse, la mayoría
de las expresiones y palabras adquiridas son vulgarismos y del tipo de frases
más frecuentes; por lo tanto, son las
que se contagian más en casi cualquier vocabulario.
Lee este artículo completo en Algarabía 143
También te interesará conocer:
• El latín vulgar
• ¿Qué estás diciendo cuando dices «NACO»?
• Ciencia de la chingada
• Prosaico