Así, un tema y una costumbre que antes no se cuestionaba —basta con ver una película de los años 60 para darnos cuenta de que todo el mundo fumaba y, además, todo el tiempo— hoy es objeto de debates y encontronazos, y lo será hasta que deje de importarnos, porque haya dejado de ser costumbre —como mascar tabaco o usar sombrero.
Al respecto nos dice don José de la Colina que, si bien el debate puede parecer nuevo, «ya las literaturas, la escrita y la hablada, desde hace mucho tiempo habían iniciado el debate entre fumófagos y fumófobos», los que por un lado defienden su derecho a fumar y su libertad de ejercerlo, y los que, por otro, condenan el fumar y a quien lo hace.
Sin embargo, como en Algarabía no iniciamos debates ni nos gusta crear polémica, hemos decidido que, a cuento de la fumofilia y la fumofobia, lo que procede solamente es recopilar algunas citas y frases de la literatura, tanto escrita como hablada, acerca del fumar y de por qué es un placer. Ahí les van:
«Si dejas de fumar, beber y hacer el amor, no es que vayas a vivir más, es que la vida se te hará larga, larga, larga.»
Clement Freud.
«Nadie se ha muerto por no fumar, pero ¿para qué arriesgarse?»
Satish Chothani.
«El puro es el complemento indispensable de toda vida de solaz y elegancia.»
George Sand.
«Entra un viejo señor en la tabaquería, pide cigarros y la tabaquera se los entrega. Después de pagar, el viejo señor lee en la cajetilla: “Este producto puede causarle impotencia”. Así, el viejo señor dice: “No, éstos no. Mejor deme de los que matan”.»
Jordi Domingo.
«Al cumplir 70 años me he puesto la siguiente regla de vida: no fumar mientras duermo, no dejar de fumar mientras estoy despierto y no fumar más de un solo cigarro a la vez.»
Mark Twain.
«Comer y dormir son las únicas actividades que deberían poder interrumpir el placer de fumar un puro.»
Mark Twain.
«Bebo mucho, duermo poco y me fumo un puro tras otro. Puedo decir que estoy 100% en forma.»
Winston Churchill.
«Ahora lo único que extraño del sexo es el cigarro que te fumas después. Ése y el primero que te fumas en la mañana son los mejores. Sabe tan rico que, si hubiera sido frígida, hubiera fingido sólo para poder fumármelo.»
Florence King.
«Si pago 10 dólares por un puro, primero le hago el amor y luego me lo fumo.»
George Burns.
«Miles de no fumadores se mueren a diario, así que tengan cuidado.»
Bill Hicks.
«Si hubiera seguido el consejo de mi médico de dejar de fumar cuando me lo dijo, no hubiera podido asistir a su funeral.»
George Burns, a los 98 años.
«La única manera de terminar con un mal hábito es reemplazarlo con uno mejor.»
Jack Nicholson, explicando por qué ahora fuma puro y no cigarro.
«A veces un puro es solamente un puro.»
Sigmund Freud, cuando le preguntaron sobre el simbolismo fálico de los puros.
«El tabaco, que casa admirablemente con el alcohol —si el alcohol es la reina, el tabaco es el rey—, es un amable compañero para enfrentar todos los acontecimientos de la vida. Es el amigo de los buenos y de los malos momentos. Se enciende un cigarro para celebrar una alegría y para ahogar una pena. Estando solo o acompañado.»
Luis Buñuel.
«¡Ah, si por lo menos hubiera traído mi puro, podría haber reestablecido mi dignidad.»
Charles Dickens.
«Gentlemen, you may smoke.»
El rey Eduardo VII de Inglaterra, al dar por terminada la prohibición de tabaco que había impuesto la reina Victoria a principios del siglo XX.
«Lo que este país necesita es un buen puro de 5 centavos.»
Thomas Marshall, vicepresidente de EE. UU. (1913-1921), hablando de la decadencia de su país.
«En mi caso, las únicas herramientas que necesito para sobrevivir son papel, tabaco, comida y algo de whisky.»
William Faulkner
«Si eliminas el cigarro y el juego, te sorprenderías de que la mayor parte de los placeres que puede disfrutar el ser humano son los mismos que puede disfrutar su perro.»
George Bernard Shaw.
«Una mujer es placer ocasional, pero un puro siempre es un puro.»
Groucho Marx.
«Toda el alma resumida
cuando lenta la consumo
entre cada rueda de humo
en otra rueda abolida.»
Stéphane Mallarmé —en versión de Alfonso Reyes—.
«Sé que el cigarro es un vicio que mata lentamente, pero no tengo prisa.»
Voltaire.
«No comprendo cómo se puede vivir sin fumar… Cuando me despierto, me alegra saber que podré fumar durante el día, y al comer tengo el mismo presentimiento. Sí, puedo decir que como para fumar. Un día sin tabaco sería el colmo del aburrimiento y si por la mañana tuviese que decirme: “Hoy no puedo fumar”, creo que no tendría el valor para levantarme.»
Hans Castorp en La montaña mágica, de Thomas Mann.
«Yo siempre me pongo a dieta y también todas las semanas dejo de fumar.»
Umberto Eco.
«Un cigarrillo es el perfecto ejemplo del placer perfecto. Resulta exquisito y te deja insatisfecho. ¿Qué más se puede pedir?»
Oscar Wilde.
«Fuma, folla y bebe, que la vida es breve.»
Proverbio español.
«El tabaco es un placer en todos los sentidos: de la vista —es bonito ver bajo el papel de plata los cigarrillos blancos, alineados en perfectas filas— del olfato, del tacto… Si me vendaran los ojos y me pusieran entre los labios un cigarrillo encendido, me negaría a fumar. Me gusta sentir el paquete en el bolsillo, abrirlo, palpar la consistencia del cigarrillo, notar el roce del papel en los labios, gustar el sabor del tabaco en la lengua, ver brotar la llama, arrimarla, llenarme de calor.»
Luis Buñuel.