Las falacias enturbian la comunicación porque son juicios que parecen verdaderos, pero no lo son. Identificarlas es útil para expresar claramente nuestras ideas y para impedir que otros nos manipulen. Basta con leer los anuncios de la calle para que empiecen a saltar a nuestra vista. Son tan usuales desde tiempos antiguos que están clasificadas en latín. La siguiente es una lista de algunas falacias no formales.
Falacias no Formales más Frecuentes
- Ad baculum —que apela al báculo—: sostiene la validez de un argumento basándose en la coacción, la intimidación y en la amenaza del uso de la fuerza.
Si no votas por quien ya sabes, vas a perder lo que ya sabes. - Ad consequentiam —que apela a las consecuencias—: consiste en negar la veracidad de un argumento sólo por las posibles consecuencias negativas del mismo.
—Seguro que hay vida en otros planetas; si no, sería un terrible desperdicio de espacio—. [Tomado de la película Contacto (1997)] - Ad hominem —que apela a la persona—: basada en la descalificación al interlocutor o a otra persona aludida.
—Susana dice que Javier llegó tarde. —No le hagas caso, ella es muy impuntual. - Ad ignorantiam —que apela a la ignorancia—: se dice que algo es verdad sólo porque no se ha probado su falsedad.
—¿Que tu hermana fue abducida por alienígenas? Eso es ridículo —dijo Scully. —Bueno, mientras no puedas probar lo contrario, tendrás que aceptar que es cierto —respondió Mulder. [Tomado de la serie de televisión Los expedientes secretos X] - Ad misericordiam —que apela a la lástima—: busca que el interlocutor acepte la verdad de una conclusión por piedad o compasión.
No puede ser que mi trabajo esté mal redactado: pasé dos noches sin dormir para hacerlo. - Ad nauseam —hasta la náusea—: se apela a que un tema se ha discutido tanto —hasta el hartazgo— que no vale la pena cuestionarlo.
¡Ay, ya, por favor!, llevamos años discutiendo esto y no llegamos a nada; mejor digamos que es cierto. - Ad numerum —por número—: consiste en afirmar que cuanta más gente sostenga una proposición, más cierta es.
Tenemos casi 4 mil farmacias en el país, ¿aún crees que los medicamentos genéricos no sirven? [Tomado de un espectacular] - Ad populum —que apela al pueblo—: muy similar a la falacia anterior, también invoca al número de personas que sostienen un argumento, pero además llama a los sentimientos y no al razonamiento.
Negar el milagro del Tepeyac sería ir en contra del fervor de millones de mexicanos. - Ad verecundiam o magíster dixit —que apela a la autoridad o «lo dijo el maestro»: defiende que algo es cierto solamente porque lo ha dicho una autoridad o un personaje destacado; sin embargo, no se puede desechar por falaz un argumento cuando el personaje es un experto en la materia.
—El Papa, el mismísimo Santo Padre, ha bendecido hoy al señor Corleone. ¿Se cree usted más listo que el Papa?— [Tomado de la película El padrino III (1989)] - Cum hoc ergo propter hoc —«junto con esto», «a consecuencia de esto»—: se da por sentada una relación causa-efecto entre dos cuestiones que no necesariamente la tienen.
Ese joven usa rastas; debe de ser drogadicto. - Falso dilema: cuando se presenta la situación como si sólo hubiera dos alternativas posibles, o cuando se emplean términos en disyuntiva que no son ciertos, exhaustivos o excluyentes.
Si no te gusta el cine mexicano, es porque eres un malinchista.