El auto más deseado del siglo XIX

Lo que empezó como una fábrica de muebles, se convirtió en una gran empresa dedica a la producción de automóviles. Fundada en 1867 por René Panhard y Jean Louis Perin, esta compañía originalmente se llamó Perin et Pauwels y, como ya se dijo, estaba dedica a la elaboración y venta de muebles de madera.
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En 1876, cuando ya estaba entre sus filas el ingeniero Emile Levassor, la empresa diversificó sus actividades e inició la fabricación de motores de petróleo. Además, cambió su nombre a Penhard et Levassor y abandonó completamente el negocio de los muebles cuando, en agosto de 1890, le vendió los primeros motores a Armand Peugeot, pionero de la industria automotriz.

Un año después, Emile Levassor creó el Systeme Panhard, el cual marcó un parte aguas en la fabricación de motores para autos, ya que este sistema fue el primero en colocar el motor en frente del chasís y transmitir la tracción a las ruedas posteriores mediante un sistema de cadena.
Gracias a dicho sistema, un coche fabricado por Penhard et Levassor fue el primero que logró viajar de París hasta Versalles sin ningún problema mecánico que interrumpiera su camino. También logró viajar de París a Étretat —una distancia de 225 kilómetros— a una velocidad de 9.6 kilómetros por hora.

Este sistema resultó tan efectivo que otros ingenieros intentaron copiarlo, pero sin obtener el mismo éxito. En octubre de 1881, la firma P&L inició la fabricación de los primeros automóviles en serie. Su fama aumentó cuando, en 1895, uno de sus automóviles viajó de París a Burdeos y de regreso sin ningún contratiempo. Para 1890, P&L ya era el fabricante y exportador de automóviles más conocido del mundo.