El lenguaje es una travesura, así tal cual. ¿Quién le dio permiso a la «j» de juntarse con la «e» para hacer palabras como jengibre, jeroglífico y jerarquía; pero que no lo hiciera con geranio, germen y geriatra porque ésas son para la «g»?
Y las diabluras siguen con la c, la s y la z, donde, además, tienen el descaro de combinarse: escenario, accidente y excepto. Lo que ya es un verdadero abuso, es cuando se pueden usar dos letras en una misma combinación: coser y cocer. Ya sé que no significan lo mismo, pero no hay que ser.
En fin, entre que son peras o son manzanas, juguemos mientras con las palabras y dejemos para más adelante la horrografía —mejor conocida en la escuela como la ortografía.
¿Puedes leer esto rápido?
¿Adivinas quién es?
Algunos viven en zanja
y los conocemos por sus babas.
Unas veces comen plantas
y se deslizan con su panza
˙ןoɔɐɹɐɔ ןǝ
Atoralenguas, decifranzas y rimoderas
El lenguaje es una travesura, así tal cual. Quien le dio permiso a la «j» de juntarse con la «e» para hacer palabras como jengibre, jeroglífico y jerarquía; pero que no lo hiciera con geranio, germen y geriatra porque ésas son para la «g».
- jueves 5 septiembre, 2013
Compartir en:
Twitter
Facebook
LinkedIn
Email
Deja tu comentario
Suscríbete al Newsletter de la revista Algarabía para estar al tanto de las noticias y opiniones, además de la radio, TV, el cine y la tienda.