Frase imperativa con que le indicamos a alguien que desacreditamos de manera terminante su actitud o acción. El grado imperativo se refuerza usando formas adverbiales como ahorita o ahorititita.
También se puede expresar un sentimiento más profundo con pronombres personales; por ejemplo, te me vas a chingar a tu madre.
• —¿Y si mejor cortamos? —¿Y si mejor vas y chingas a tu madre?
• —Te juro que sólo es una amiga. —Pues tú y tu amiga vayan y chinguen a su madre.