En muy pocas lenguas del mundo existe una palabra para nombrar a una persona que tiene el mismo nombre que otra. Esta palabra la tenemos los mexicanos y es tan simpática, útil y buena que nos la han copiado los argentinos, los chilenos, los colombianos y hasta los españoles.
Su origen proviene del náhuatl, que es la lengua que se habla en el centro de México desde antes de que llegaran los españoles. La palabra náhuatl tocaitl se forma de to, que significa ‘nuestro’, y cáitl, que significa ‘nombre, honra, fama’. Es decir, tocayo significa «nuestro nombre».
Esta palabra es muy usada en México, por ejemplo en algunas expresiones como:
- ¡Ése, mi tocayazo!
- ¿Qué pasó, tocayita?
Los tocayos
Estaban dos amigos en la calle, cuando a uno de ellos le gritan: «¡Adiós, tocayo!». Su amigo le pregunta:
—¿Lo conocías?
—Sí, pero no me acuerdo cómo se llama…