En 1968 George Harrison (1943-2001) le sugirió a uno de sus fans que aprendiera a tocar la cítara, y su discípulo epistolar descaradamente le pidió dinero para comprar una. Ésta es la respuesta que el «beatle silencioso» le envió.
Rishikesh, Himalayas, India, 6 de abril
Querido Iván,
Ésta es una amiga mía, creo que debes conocerla. Se llama Mary
y sólo viene a inicios de la primavera, después del periodo del monzón. Acabo de prestarle mis últimos 100 dólares. Desafortunadamente no tuviste suerte, así que tendrás que quedar satisfecho con mis mejores deseos.
Sigue practicando, y la mejor de las suertes para tu grupo y para ti.
George Harrison