Todos somos románticos —introducción—
Los románticos, en origen, nada tiene que ver con lo almibarado y cursi del Día de san Valentín, era una postura frente a la vida.
Los románticos, en origen, nada tiene que ver con lo almibarado y cursi del Día de san Valentín, era una postura frente a la vida.
Queremos conocer las mil y una respuestas de nuestros lectores para la edición que tendremos, pasional e inspiradora.
Hay veces que ni todas las palabras son suficientes para describir todo lo que involucra una historia de amor.
La costumbre, con todo, es propia de nuestra lengua.
Una relación de afecto entre hombres que no tienen miedo de expresar sus sentimientos, sólo que llega a juzgarse como algo diferente debido a las creencias y al machismo de nuestra cultura.
El latín sigue bien vivo en nuestra lengua. Te retamos a comprobarlo.
Queridos míos, recorriendo los círculos intelectuales de esta gran ciudad, me encontré con que todos andan comentando el nuevo libro del escritor y piloto francés Antoine de Saint-Exupéry.
Chicos y chicas, sigo de viaje por París. Ay, es que es la ciudad luz, la ciudad del amor y, por ende, la ciudad del chisme.
Hijos de mi alma, ando de paso por este pequeño pueblo costero, que es pintoresco e interesante, pero no por lo turístico, sino por las personas que han hallado refugio en él.
Pepe Le Pew, un simpático zorrillo francés que vive enamorado del amor.